Rubén Gala comparecía en la sala de prensa del Municipal ‘El Prado’ para dar una valoración acerca del estreno de su equipo como local esta temporada en un encuentro que se saldaría con derrota por 2-3 frente al Linares Deportivo.
En su resumen del encuentro, el técnico destacó el arranque de partida: “Creo que salimos muy bien al campo. El equipo fue muy ofensivo, muy valiente. Habíamos trabajado durante la semana cómo atacar sus espacios y debilidades, sabiendo al rival al que nos enfrentábamos, por supuesto. El equipo tenía claro lo que tenía que hacer. Nos fuimos con un resultado injusto al descanso con un 0-1 que llegó tras una acción puntual”.
Mientras, “en la segunda parte retocamos algunas cosillas, el equipo salió otra vez bien, tuvimos ocasiones para empatar. El equipo fue otra vez muy ofensivo y en una acción absurda o de mala suerte, como la queramos llamar, nos hacen un golpeo, un rebote y nos meten el segundo gol”.
“Teníamos preparados un par de cambios para ser más ofensivos todavía, nos trastocó un poco pero no bajamos los brazos pese a encajar un tercer gol que no debíamos encajar porque tenemos que ser más contundentes, sobre todo en el duelo, antes del disparo”, añadía.
Valoraba el técnico palentino que su equipo no vendría abajo pese a llevar un 0-3 en el electrónico: “A pesar de ir tres goles abajo el equipo se repuso. Metimos una línea de tres atrás, jugamos con jugadores en altura, dos puntas, mucha personalidad en el campo y fuimos capaces de hacer dos goles y el partido termina ahí.”
Pese a la amargura de la derrota, Rubén Gala se mostraba satisfecho por el trabajo de sus jugadores: “Felicito al rival por la victoria, felicito a mi equipo porque hizo lo que tenía que hacer para ganar el partido y no se ha podido y espero que sigan con esta actitud y esta manera de jugar porque estoy convencido que los resultados van a llegar”.
“Te vas fastidiado con el resultado pero me voy súper contento con el desarrollo del partido porque lo que he visto en los 90 minutos, aparte del resultado, que no es previsible y no lo controlas, he visto que lo hecho durante esta semana sumado a lo de estos meses de atrás de pretemporada se ha reflejado en el campo. Tengo que estar orgulloso porque hacen lo que se les pide e intentamos inculcarles”, añadía.
Con esta derrota los cerámicos suman su segundo ‘cero’ de la temporada, pero el preparador tiene motivos para creer que el equipo acabará consiguiendo sus frutos: “Tengo que ser positivo porque viendo lo que he visto en el campo, viendo lo que vi en Pontevedra hasta la expulsión y el segundo gol, viendo cómo vamos evolucionando en los entrenamientos y en la actitud de la plantilla y el club soy optimista porque nos quedan 36 jornadas, nos queda un mundo todavía y esto son puntos. Cuando llegue una victoria intentaremos que lleguen más y lo hagan de manera consecutiva. La manera de competir es lo que ha demostrado el equipo en este partido y no hay más”.
