Madrid acogía este pasado miércoles 24 de febrero la etapa final del World Indoor Tour Gold, una cita que reunió en Gallur a alguno de los mejores atletas internacionales del momento y que se desarrolló bajo estrictas medidas de seguridad y sin la posibilidad de acoger público en sus instalaciones.
En esta cita tomaba parte el oropesano Sergio Paniagua, que llegaba dispuesto a resarcirse de la caída que le había impedido luchar por las medallas en el Nacional y también dispuesto a conseguir rebajar su marca personal dentro de la distancia de los 1.500 metros lisos y que ello le permitiese hacer mínima para el Europeo Indoor de Torun.
La carrera tendría como protagonista al etíope Selemon Barega, el favorito al triunfo, muy ambicioso y siguiendo a la liebre Alberto Guerrero, que marcó un ritmo rapidísimo. Ambos se separaron pronto de todos sus rivales, y una vez retirada la liebre quedó Barega solo en cabeza con enorme ventaja.
Pero ya antes el burgalés Jesús Gómez, campeón de España, emergió del grupo con enorme personalidad, recortando poco a poco la ventaja a Barega. El etíope acusó el esfuerzo realizado y por un momento pareció que Gómez iba a alcanzar al africano. No fue así y Barega entró vencedor en 3:35.42 con Jesús Gómez en 3:36.32, marca personal, mejor marca española del año y séptima de la historia del atletismo patrio.
Más atrás hubo muchas alternativas, sobresaliendo Sergio Paniagua, que realizó 3:39.09, marca personal y mínima continental (finalmente no ha sido seleccionado), superando al polaco Marcin Lewandowski, que era cuarto. El catalán Llorenç Sales consiguió también marca personal con 3:40.66.
